Venid hasta el borde.
No, que caeremos.
Venid hasta el borde.
No, que caeremos.
Se acercaron al borde.
Los empujó, y volaron.

Guillaume Apollinaire

domingo, 5 de junio de 2011

Esbozo

¿Somos más nosotros mismos, solos o acompañados?

Reflexionando nos damos cuenta luego en soledad, que tenemos un saboteador que nos suplanta en cuanto nos despistamos y esto sucede casi siempre cuando estamos con otros, parece como si entráramos en la noria de una feria, hay mucho ruido, nos aturdimos y al saboteador le resulta fácil manejarnos, nuestra conducta se hace más torpe y más estúpida. Luego, en el silencio te dices la próxima vez no dejaré que vuelva a pasar pero de poco sirven estos buenos propósitos porque siempre te descubres que el maldito saboteador ha vuelto a meter mano, la pata y hasta nos dejamos llevar del todo a su antojo… ¿por qué es tan difícil tomar las riendas de quien poco a poco y con tanto esfuerzo nos vamos descubriendo en soledad? Ponernos en público así, tiernos como recién nacidos requiere tanta fuerza y humildad que se convierte en la gran prueba y nos asustamos, flaqueamos y dejamos que el saboteador nos enmascare… es la inercia del pasado supongo. Hay tanto por hacer…por crecer...por encontrar...



"22. Propio del hombre es amar incluso a los que tropiezan. Y eso se consigue, en cuanto se te ocurra pensar que son tus familiares, y que pecan por ignorancia y contra su voluntad, y que, dentro de poco, ambos estaréis muertos y que, ante todo, no te dañó, puesto que no hizo a tu guía interior peor de lo que era antes. (Libro VII)

51. Ni seas negligente en tus acciones, ni embrolles en tus conversaciones, ni en tus imaginaciones andes sin rumbo, ni, en suma, constriñas tu alma o te disperses, ni en el transcurso de la vida estés excesivamente ocupado. Te matan, despedazan, persiguen con maldiciones. ¿Qué importa esto para que tu pensamiento permanezca puro, prudente, sensato, justo? Como si alguien al pasar junto a una fuente cristalina y dulce, la insultara; no por ello deja de brotar potable. Aunque se arroje fango, estiércol, muy pronto lo dispersará, se liberará de ellos y de ningún modo quedará teñida. ¿Cómo, pues, conseguirás tener una fuente perenne [y no un simple pozo]? Progresa en todo momento hacia la libertad con benevolencia, sencillez y modestia. (Libro VIII)

26. Has soportado infinidad de males por no haberte resignado a que tu guía interior desempeñara la misión por la que ha sido constituido. Pero ya basta. (Libro IX)"

Del libro 'Meditaciones' de MARCO AURELIO

Obra completa en http://www.imperivm.org/cont/textos/txt/marco-aurelio_meditaciones.html


No hay comentarios: